¿Sabías que tiramos 1/3 de toda la comida que compramos? ¿Qué pasaría si pudieras convertir los desechos en sabor?
¿Es evitable el desperdicio de alimentos?
Las dos causas principales del desperdicio de alimentos se deben principalmente a la pérdida de agua y productos marchitos. Esto conduce a un cambio de apariencia y un cambio de textura en los productos. Nuestros desechos se pueden dividir en tres categorías: evitables, inevitables y posiblemente evitables.
El 60% de los residuos son evitables: alimentos que podrían haberse comido si se hubieran gestionado mejor.
El 19% es inevitable: cosas como bolsitas de té y huesos de pollo.
Recetas para reducir el desperdicio de alimentos.
El 20% se clasifica como posiblemente evitable. Esto incluye la comida que ves aquí, cáscaras de patata, tallos de brócoli y recortes frondosos.
Estos se pueden comer y disfrutar, si están preparados adecuadamente. Aquí se explica cómo convertir estos desperdicios en sabor:
Patatas fritas de piel de patata
Pesto de hoja de remolacha
Ensalada de tallo de brócoli
Guía práctica: mejores condiciones para diferentes tipos de alimentos
- Coloque los productos perecederos desde la parte posterior del refrigerador hacia el frente, de modo que los artículos que necesitan usar primero sean los más visibles.
- Envuelva cualquier artículo que tenga olores fuertes o alto contenido de humedad.
- Almacene frutas y verduras en los cajones, donde la humedad atrapada ayuda a preservar la calidad de los alimentos durante períodos de tiempo más largos. La mayoría de las frutas y verduras deben almacenarse a baja temperatura y alta humedad.
- Envuelva la carne cruda y las aves de corral de manera segura para que no se produzcan fugas ni contaminación de otros alimentos o superficies. Cualquier carne que se mantenga durante más de dos días debe congelarse.
- Mantequilla y queso: estos deben colocarse en recipientes herméticos especiales o envolverse en papel de aluminio o bolsas de polietileno para excluir la mayor cantidad de aire posible.